viernes, 6 de mayo de 2011

Art.21.El YO en la corteza prefrontal (Entrevista a Elkhonon Goldberg)

Elkhonon Goldberg, es uno de los neuropsicólogos más destacados de nuestro tiempo, así como el mayor entendido sobre la estructura y función del lóbulo frontal del cerebro. Goldberg denomina a nuestro lóbulo frontal: órgano de la civilización, pues en él residen nuestras facultades superiores, que hacen posible la vida en sociedad, y, lo que es más importante, una vida orientada más allá del corto plazo, de la supervivencia inmediata, la que, en definitiva, permite acumular capital y cultura.
Este sabio de la neurociencia nació en Letonia, cuando esta pertenecía al Imperio Soviético. Corrían los años posteriores al despotismo de Stalin y Aleksander.R.Luria, su maestro, trabajaba con el carné del Partido y sin plantearse la posibilidad de rebelarse contra el estado de cosas, acaso muy viejo ya para hacerlo. Sería injusto no reconocer a Luria, sin embargo, su portentosa obra como neuropsicólogo, cumbre de la psicologia soviética. La ciencia de Luria tenía también importantes antecedentes en la obra de Lev Vigotsky, cuya psicología del desarrollo se estudia hoy junto a la de Piaget.
Goldberg no aceptó el opresivo y asfixiante ambiente de la sociedad soviética, y huyó a la tierra de la libertad. Desde entonces ejerce como investigador de neuropsicología en EEUU, con gran éxito. Muchos de sus experimentos y de sus teorías nos los relata en sus dos obras, ambas traducidas a nuestro idioma: El Cerebro Ejecutivo y La Paradoja de la Sabiduría.

En "El Cerebro Ejecutivo", además de relatar sus vivencias en la URSS y darnos algunas trazas de su modo de ver el mundo de hoy, nos expone con gran brillantez lo que es el lóbulo frontal de nuestro cerebro y lo que representa; y presenta dos teorías originales sobre la localización de las funciones cerebrales: la primera se refiere a la especialización hemisférica del cerebro, postulando que uno de los hemisferios se dedica al aprendizaje de nuevas destrezas, y otro a ejecutar destrezas ya aprendidas. La otra afirma que (en el caso del cerebro ejecutivo) no existe una localización concreta y modular de las funciones cerebrales sino un continuo de alta plasticidad donde estas se van colocando dependiendo de la biografía del individuo. La teoria del gradiente cognitivo es hoy la competencia de la teoría modular de la localización de las funciones cerebrales y propone la existencia de un "cerebro ejecutivo de amplio espectro", frente a la plétora de "cerebros" especializados que propone el modularismo.

En "La Paradoja de la Sabiduría" nos habla de cómo el paso del tiempo, a pesar de reducir facultades mentales por la progresiva degeneración neuronal asociada inevitablemente al envejecimiento, permite la creación de patrones, que ayudan a manejarse en la vida de forma sencilla y, en cierto sentido, clarividente, aportándonos, en su conjunto, eso que se ha dado en denominar sabiduría, que es mucho más que la simple experiencia.
1) Haeckel decía que la ontogenia recapitula la filogenia. El lóbulo frontal en nuestro cerebro es el que madura más tarde, y es, asimismo, la parte del mismo más reciente evolutivamente. ¿Se cumple lo postulado por Haeckel en el desarrollo cerebral?
Sí, se cumple. El córtex prefrontal en particular es de los más recientes filogenéticamente y el último en madurar en la ontogénesis. Siguiendo la ley de "evolución y disolución" de Hulings Jackson es también el más vulnerable a los efectos de diversos ataques neurológicos y del envejecimiento normal.
2) Últimamente se están poniendo de moda los brain trainer para las personas mayores. Usted es un precursor en la creación de técnicas para el entrenamiento cerebral que mejoran la calidad de vida de los mayores. ¿Podría contarnos algo sobre sus actividades en este campo y los resultados obtenidos? ¿Qué opinión le merecen los brain trainer "de bolsillo" que ahora se venden?
El concepto de "entrenador cerebral" en dispositivos móviles es viable, pero sus materializaciones actuales son aún bastante limitadas. La mejora cognitiva es aún un concepto muy nuevo, pero acabará encontrando su camino en dispositivos móviles.
3) De zurdo a zurdo. ¿Podría decirme las diferencias anatómicas y funcionales entre nuestro cerebro y el de los diestros? ¿Podría hablarse, más allá del uso de una u otra mano, de diferencias conductuales? ¿Cómo y por qué cree que evolucionaron ambas tendencias?
La zurdera es un asunto complicado. Primero, hay que distinguir entre zurdos "naturales" y zurdos "patológicos". Los primeros son zurdos "genéticos"; los últimos han llegado a serlo como resultado de una lesión perinatal, o en la temprana infancia, lateralizada al hemisferio izquierdo. Supongo que su pregunta se refiere a los zurdos "naturales". Mi trabajo sugiere que la búsqueda de novedad es un rasgo más común entre los zurdos naturales que entre los diestros. Así que puede argüirse que la vieja creencia popular de que la creatividad es particularmente prevalente entre los zurdos (los naturales) tiene alguna base real. ¡Felicidades! En contraste, mi trabajo sugiere que los diestros son más conservadores en sus estilos cognitivos. En mi libro The Executive Brain (El cerebro ejecutivo, editorial Crítica) arguyo que la sociedad necesita de ambos estilos cognitivos y que esta es la ventaja evolutiva de tener tanto diestros como zurdos.
4) Según en qué zona del cerebro se produzca, un daño tendrá mejor o peor pronóstico. ¿Qué daños tienen, a día de hoy, mejor y peor cura? Que el uso hace la función es una ley en neurología, y ahora se ha descubierto que en el cerebro adulto hay células madre. ¿Qué papel complementario representan la rehabilitación y la naturaleza en la mejoría de estos casos?
Los efectos de la neuroplasticidad guiada por rehabilitación cognitiva pueden ser muy profundos, mayores que lo que se pensaba antes. Pero no hay magia, y la recuperación tras una lesión cerebral grave casi nunca es completa.
5) A usted la idea de que el cerebro funciona por módulos, creados por etapas en la evolución, no le convence demasiado, al menos en su versión fuerte. Sostiene que hay gradientes. ¿Podría desarrollar brevemente esta idea?

En mi libro El cerebro ejecutivo arguyo que la evolución del cerebro ha estado dominada por la transición del principio modular (cuyo mejor ejemplo son las estructuras subcorticales como el tálamo) a un principio distribuido de organización neural (cuyo mejor ejemplo es el córtex de asociación heteromodal). El primero se basa en una fuerte prededicación funcional, genéticamente programada, de ciertas estructuras cerebrales. El último proporciona un alto nivel de complejidad capaz de desempeñar una amplia gama de funciones según dicten las necesidades del organismo. Evidentemente, una estructura neural caracterizada por un alto grado de adaptable complejidad es computacionalmente más potente que una colección de estructuras estrechamente especializadas.
6) Usted es un gran aficionado a la teoría política y a la historia. Sus años en la URSS y su salida de ella son un hito en su vida que no puede dejar de recordar en su obra ensayística. Caído el muro, tras el 11-S, ¿cómo ve el mundo de hoy?
La caída del Muro de Berlín representó el final de un conflicto y el 11-S la emersión de otro. El mundo no es un lugar apacible, y la predicción por Fukuyama del "fin de la historia" no se ha hecho realidad. Si acaso, el conflicto se ha hecho más complejo: de bilateral a multilateral. A riesgo de parecer aburrido, me referiré de nuevo a El cerebro ejecutivo, pues mi análisis de los paralelos entre la evolución del cerebro y la evolución de la sociedad predice esto, en cierto modo.
7) En el debate naturaleza/crianza uno de los apoyos en favor de esta última es la plasticidad del cerebro. Sin embargo el estudio del mismo demuestra que no es una tabla rasa, que su plasticidad es limitada. ¿Cuánta plasticidad cree que tiene el cerebro? ¿Pueden las personas cambiar drásticamente, transfigurarse en alguien distinto, o bien la personalidad base es casi una condena o una bendición genética y apenas podemos hacer nada para cambiarnos a nosotros mismos? (como ve le marco dos extremos para que se mueva a sus anchas por en medio).
Estos conceptos de plasticidad y rigidez son muy difíciles de cuantificar. Por supuesto, podemos cambiarnos a nosotros mismos hasta cierto punto mediante nuestras experiencias y actividades. Por otra parte, nunca se me ha ocurrido intentar enseñar a mi perro Brit álgebra, geometría o ruso. Ciertas limitaciones genéticamente determinadas impuestas a nuestra arquitectura cerebral no pueden superarse entre especies, o incluso dentro de una especie.
8) Usted ha propuesto una teoría sugestiva sobre el papel desempeñado por los hemisferios cerebrales izquierdo y derecho en el desarrollo y en el aprendizaje. Incluso podría decirse que su aceptación supondría una revolución en la neurociencia. Dicho muy sucintamente el cerebro derecho lidia con la novedad y el izquierdo maneja con soltura lo conocido, articulado en "patrones". ¿Qué evidencias experimentales se van encontrando para apoyar estas ideas?
Hay mucha evidencia en apoyo de mi teoría de la especialización hemisférica en novedad y rutina. Esto se ha demostrado en diversas escalas temporales, desde horas hasta décadas. Suponga que crea un experimento de laboratorio en el cual presenta a sus sujetos una nueva tarea con la que se van familiarizando durante algunas horas. Usando una variedad de tales tareas y varios métodos de neuroimaginería funcional, se ha mostrado que el desplazamiento de derecha a izquierda del control hemisférico de la tarea en función de la creciente familiaridad con ella es un fenómeno universal demostrable en una gama muy amplia de tareas cognitivas. Esto ocurre en una escala temporal de horas. Suponga ahora que compara la neuroanatomía funcional subyacente a una tarea cognitiva en individuos ajenos a ella y en individuos expertos en ella (por ejemplo el procesamiento de música en personas legas en música y en músicos profesionales). La tarea estará asociada con activación del hemisferio derecho en legos y del hemisferio izquierdo en expertos. Este contraste representa el desplazamiento del control hemisférico de la tarea que ocurre en el transcurso de años o tal vez incluso décadas. Así que los hallazgos son muy convincentes. Creo ciertamente que mi teoría tiene importantes implicaciones en muchas áreas de la neurociencia y la neuropsicología. Pero evidentemente representa un apartamiento tan radical de puntos de vista más tradicionales que muchos de mis colegas la encuentran difícil de digerir. Así que tal vez usted ayudará a promocionarla :)
9) El hombre, según madura, va adquiriendo patrones que le permiten manejarse en su entorno, se va haciendo con ello más sabio, tal como usted nos señala en su excelente La Paradoja de la Sabiduría. Este incremento en la sabiduría corre parejo a un deterioro neuronal, a una pérdida de capacidades de computación y asimilación de experiencias. Esto tiene un gran sentido evolutivo. Cuando en la sociedad los valores predominantes son los de la juventud, cuando se pierde el referente fundamental de la sabiduría de sus mayores, cuando se abomina de la tradición y se apuesta ciegamente por la innovación: ¿no estamos ante una situación crítica?
Sí lo estamos. Al mismo tiempo, nuestra cultura está en un punto de inflexión con la tasa de acumulación de conocimiento acelerando rápidamente y el valor relativo de patrones previamente acumulados disminuyendo. Esto puede tener ramificaciones muy interesantes en términos de las ventajas relativas de diferentes tipos de organización neural: puede argüirse que el estilo cognitivo buscador de novedad asociado a la dominancia del hemisferio derecho y a la zurdera estará cada vez más cotizado.
10) En su libro "El cerebro ejecutivo: los lóbulos frontales y la mente civilizada" no parece usted muy partidario del CI como medida de la inteligencia, y propone que el consenso de un tribunal de jueces seleccionados aleatoriamente (¿una prueba de Turing cualificada?) sería una mejor aproximación a la inteligencia general; esto es porque considera usted que las personas de alto CI pueden ser sustancialmente disfuncionales en su vida diaria. Por otra parte, una amplia literatura ha demostrado una relación muy fuerte entre toda clase de resultados sociales (desde tasas de encarcelamiento hasta salarios o niveles de desempleo) y el CI. ¿Cuál es su posición en las principales cuestiones sobre el CI? (Significación de la medida, base neurológica, componentes naturaleza/crianza, heredabilidad).
Por supuesto, el CI es una mejor medida de la cognición que nada en absoluto. Pero en realidad su principal razón de ser es circular: es el llevar tanto tiempo entre nosotros. Como neuropsicólogo clínico (sigo haciendo bastante trabajo clínico), sé que el CI es extremadamente pobre como caracterización de la naturaleza del daño cognitivo como resultado de una lesión cerebral de cualquier etiología.
11) Los psicometristas han encontrado que hay un "factor de inteligencia general" (g) tras todos los factores de inteligencia sectorial que se agregan en el CI. Esto es, la inteligencia verbal, matemática, espacial... tienen una fuerte correlación entre sí.

Esto parece una muy grave dificultad para el modelo modular del cerebro, que sitúa a estas inteligencias separadamente en partes del cerebro diferentes y relativamente autónomas. Pero sería totalmente natural en su modelo del "gradiente cognitivo" si "g" se localizase en el área cerebral del "gradiente cognitivo". Así pues, ¿sería posible que el cerebro ejecutivo fuese la localización de las actividades cognitivas centrales, usando las áreas modulares como simples procesadores para manipulaciones simbólicas específicas de más bajo nivel? Más generalmente, ¿qué relación ve usted entre el cerebro ejecutivo y los procesos cognitivos?
Esta es una cuestión muy compleja que elude una respuesta breve. Se ha dicho que el córtex prefrontal soporta funciones "metacognitivas", y en este sentido se puede estar de acuerdo con su pregunta. Pero ¿qué significa "metacognición", neuralmente y en términos mecanicistas? No quiero parecer evasivo, pero le pediré que espere. Estoy trabajando en una nueva edición, ampliada, de El cerebro ejecutivo (con retraso, lamentablemente) en la que trato estas cuestiones más rigurosamente que en la primera edición.
12) Cuando, por ejemplo, un matemático demuestra un teorema, ¿está el cerebro ejecutivo involucrado principalmente en la construcción de la demostración misma, o sólo en la decisión de llevarla a cabo?
Creo que en ambas. Probablemente no sabe usted esto, pero estudié Matemáticas además de Psicología en la Universidad de Moscú hace muchos años, de modo que tengo una impresión de primera mano de lo que supone formular un teorema y construir una demostración. He hecho las dos cosas, y creo que ambas actividades han fatigado mis lóbulos frontales.
13) Las ciencias sociales (especialmente la Economía) se basan en una clara separación entre fines y medios [1 & 2]. Un agente racional tiene por una parte "preferencias", y por otra información positiva sobre el mundo y los recursos a usar para la consecución de sus fines. Los fines son no irracionales, sino arracionales (probablemente impuestos por las necesidades evolutivas del organismo), mientras que las decisiones son racionales (se supone que son elecciones óptimas para alcanzar los fines). ¿Encuentra usted alguna localización neurológica de los "fines" separada de la de los "medios"?
Sí, hasta cierto punto. Los "fines" se formulan, muy verosímilmente, en el córtex prefrontal, y los "medios" están ampliamente distribuidos por todo el cerebro.
14) ¿Cómo describe usted el proceso que convierte "deseo" en "acción"?
Me refiero a esto como toma de decisiones "centrada en el actor" o "prescriptiva". Sólo estamos empezando a estudiar este aspecto de la cognición.
Ref: http://ilevolucionista.blogspot.com

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